Enclavado en la mística Sierra Mazateca de Oaxaca, un ron artesanal ha logrado captar la esencia de su tierra y proyectarla a nivel internacional. Se trata de Ron Paranubes, un destilado agrícola que ha trascendido fronteras y se ha posicionado como una de las joyas más representativas de la producción artesanal mexicana.
Un ron con raíces mazatecas
Ron Paranubes nació de la mano de José Luis Carrera, un maestro destilador cuya familia ha mantenido por generaciones el arte de la producción de caña de azúcar y la destilación de aguardientes. Su trapiche, ubicado en la comunidad de Río Tuerto, cerca de Huautla de Jiménez, opera bajo métodos tradicionales y sostenibles que resaltan los sabores auténticos de la caña, mientras respetan el medio ambiente.
A diferencia de los rones industriales, Paranubes es un ron agrícola, lo que significa que se elabora a partir del jugo de caña de azúcar fresco en lugar de la melaza. Esta técnica, originaria del Caribe, permite obtener un producto con una mayor expresión de los sabores naturales de la caña y un perfil aromático más complejo.
Un proceso artesanal con historia
La producción de Ron Paranubes inicia en las 14 hectáreas de cultivo de José Luis Carrera, donde se siembran cuatro variedades de caña: caña dulce, caña morada/negra, caña dura y caña amarilla/criolla. Tras la cosecha manual, la caña es prensada para extraer su jugo, que luego se fermenta de forma natural en tinas de madera de pino; su proceso de fermentación dura entre 24 y 36 horas y se realiza con levaduras silvestres, sin necesidad de añadir químicos ni agentes externos.
La destilación se lleva a cabo en alambiques de cobre calentados con bagazo de caña, siguiendo una técnica ancestral que permite obtener un ron con una graduación alcohólica del 54 %. Este destilado se caracteriza por su pureza, su intensidad y su perfil aromático, en el que destacan notas herbales y frutales con un distintivo sabor a caña fresca.
Alcanzando el mercado global
Con una producción diaria promedio de 160 litros, Ron Paranubes ha logrado expandirse más allá de las montañas mazatecas y llegar a mercados como Estados Unidos, Canadá, Europa y Australia. En México, sus principales puntos de distribución se encuentran en Guadalajara, la Riviera Maya, Ciudad de México y Oaxaca, donde ha sido adoptado tanto por expertos mixólogos como por aficionados al ron artesanal.
El éxito de Paranubes radica en su calidad y autenticidad. En un mundo donde los productos artesanales y de origen han cobrado una gran relevancia, este ron ofrece una experiencia única que transporta a los consumidores a los paisajes, los sabores y la historia de la Sierra Mazateca.
Un destilado con identidad: una lección comercial para emprendedores
Ron Paranubes es más que una bebida; es un testimonio del trabajo de generaciones, de la riqueza natural de Oaxaca y del potencial de México en la industria de destilados. Su crecimiento y reconocimiento internacional demuestran que los productos artesanales pueden competir en el escenario global sin perder su esencia.
Para los emprendedores y conocedores de la industria de destilados, el caso de Ron Paranubes es un ejemplo claro de cómo la autenticidad, el respeto por los métodos tradicionales y la calidad del producto pueden convertirse en una ventaja competitiva. La clave está en saber comunicar la historia detrás de la marca, mantener la excelencia en cada fase del proceso y buscar mercados donde el valor de lo artesanal sea apreciado.
Con cada botella, Paranubes ofrece más que un ron de calidad excepcional: también lleva consigo una historia de tradición, esfuerzo y pasión. Una historia que, sin lugar a dudas, seguirá escribiéndose con cada trago.
Referencia:
Desconocido, A. (2025, 16 febrero). El ron agrícola que venció la migración forzada. El Universal. https://www.eluniversal.com.mx/estados/el-ron-agricola-que-vencio-la-migracion-forzada/
