Se aproxima una temporada alta para el turismo (verano) y lo común es que las empresas turísticas contraten personal temporal. ¿Qué deben considerar bajo el actual marco normativo?
Lo han comentado las cámaras gremiales: a partir de la reforma de contratación en México, las empresas en general —incluidas las del todo sector turístico— no podrán subcontratar personal para la temporada alta. La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco), por ejemplo, ha señalado que deberán recurrir a contratos temporales.
Ahora bien, especifican, podrá subcontratar personal siempre y cuando no forme parte del objeto social, ni de la actividad preponderante de la empresa. Por ejemplo, el personal de transporte, de limpieza y vigilancia sí podrían entrar en ese esquema.
Un gran cambio para una industria que solía tercerizar, en temporada alta, ocupaciones como servicio de mesas, camareras, cocineros o animadores de actividades recreativas, entre otros. Pero ya no más.
(Las empresas turísticas) “Con la nueva regulación tendrán que revisar qué podrán contratar a través de empresas de servicios especializados. Hay restricciones dentro del objeto social o preponderante, entonces no podrán contratar todo, como lo hacían antes, y tendrán que revisar, más que nunca, qué áreas podrán subcontratar y cuáles no”, comentó a Conexiones365 Francisco Martínez Domene, CEO The Adecco Group México.
La nueva regulación aplica para empresas de todos los giros y tamaños. Así que las compañías pueden acercarse a empresas de subcontratación especializada para que las oriente sobre las actividades que sí pueden tercerizar y cuáles son las que no, y entonces deberán manejar contratos temporales.
Cabe mencionar que información de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) señala que el plazo para que las empresas incorporen a los trabajadores subcontratados a sus plantillas vence el próximo 24 de julio de 2021, mientras que las empresas de subcontratación especializada tienen hasta el 24 de agosto del mismo año para darse de alta en el Registro de Servicios Especializados u Obras Especializadas (REPSE).
Si bien, de acuerdo con Martínez Domene, la contratación de las empresas especializadas puede tener un costo más alto, ya que se tratará de empresas fiscalizadas en su padrón, que deberán pagar impuestos y mejorar las condiciones de trabajo a sus colaboradores.
Antes de la reforma muchas de esas empresas caían en irregularidades, al evadir impuestos y no hacer los pagos que correspondían a sus trabajadores, por ley. De acuerdo con INEGI, en México hay alrededor de cinco millones de trabajadores que se encuentran en un esquema de subcontratación.
Retener talento: un factor clave
Para las compañías turísticas es indispensable contar con colaboradores bien entrenados en la atención oportuna al viajero. Hoy, que resultará más cara la contratación de personal, las empresas deberán evaluar mejor a su talento y capacitar a plantillas estables o temporales para funcionar en óptimas condiciones.
“Lo que se tiene que hacer es promover la excelencia y eso se conseguirá siempre y cuando (sus trabajadores) estén capacitados en servicios. Por supuesto, para nosotros no es un gasto: la capacitación es una inversión que seguramente redundará en calidad en el servicio y mayor atracción de clientes”, precisó Francisco Martínez Domene, que también funge como secretario general de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH).
El clima de trabajo es otro factor importante en este tiempo. Por ejemplo, respetar el cumplimiento y desarrollo de la NOM035, que habla del bienestar de los colaboradores. En este sentido, agregó el entrevistado, se tienen que establecer elementos para la detección de riesgos y planes de acción para mitigar todos los riesgos sociales y emocionales para los empleados.
Esto será especialmente importante bajo un contexto de covid-19, cuando los empleados turísticos deberán, por una parte, cuidarse para evitar contagios y, por otro lado, observar que los visitantes sigan las medidas de higiene y salud establecidas, así como lidiar con el estrés que pueda dar tanto a los colaboradores como a los viajeros estar bajo un contexto de pandemia.
Brindar todo el equipo necesario para evitar contagios, así como espacios de relajación y descanso (alineados con la NOM035) serán vitales para sostener las operaciones en un verano que parece prometedor en cuanto a recuperación de la actividad turística, pero estresante porque todavía no puede bajarse la guardia frente a la posibilidad de brotes de covid-19.
“Lo mejor que pueden hacer las empresas turísticas es cumplir estrictamente la nueva regulación de contratación (...) Lo que se pretende es cuidar los derechos de los trabajadores y hacer que se paguen impuestos”, detalló Martínez Domene.
Algunos puntos de partida
Para irse preparando de cara a la temporada alta bajo los nuevos parámetros de la reforma de contratación en México, hay que considerar:
- Elija una empresa de subcontratación especializada que esté dada de alta en el REPSE. Cuide que tenga una reputación solvente, que cumpla estrictamente con la ley, cuidando los derechos de los trabajadores y el puntual pago de impuestos
- Recuerde que, hoy, su empresa se convierte en responsable solidaria con la empresa especializada que contrate, para que se cumplan con todos los requisitos de ley. Es decir, pueden implicar a su compañía si se encuentran irregularidades en la empresa especializada.
- La tercerización formal busca que las empresas cumplan con requisitos como la observación de los protocolos sanitarios, así como brindar seguridad social, aguinaldo y otras prestaciones de ley a sus colaboradores.
- Las empresas de subcontratación ya no podrán ser patrones del personal que colocan en las compañías. En todo caso, solamente pueden auxiliar en los procesos de reclutamiento y capacitación del personal.
- Está prohibido que una tercera empresa sustituya la nómina de trabajadores de tiempo completo y de ocupación preponderante en la compañía.
Estas consideraciones deberán formar parte de sus preparativos de temporada alta. Y de ahora en adelante, para toda la operación.
