Las tapas tienen una rica tradición como alimento básico de la dieta española, y su popularidad se ha extendido por todo el mundo, incluso en otras cocinas, por su conveniencia y adaptabilidad a casi cualquier ocasión.
Los verdaderos orígenes de las tapas siguen sin estar claros, pero su popularidad parece arraigada en la práctica de los hoteles de posaderos que ofrecen comida y alojamiento a los viajeros en la España anterior al siglo XIX. Con los anfitriones incapaces de escribir y los viajeros a menudo incapaces de leer, en lugar de un menú, los posaderos servirían una pequeña muestra de platos en la tapa de una olla. La palabra "tapa" se ha ganado su lugar definiendo no solo una categoría de restaurante, sino un estilo de servir comida en trozos pequeños del tamaño de un bocado.
Otras fuentes registran que más tarde, los bares servían bebidas con una tapa en la parte superior para mantener alejadas las moscas y esa tendencia de alguna manera se transformó en servir pequeños trozos de jamón o pan en la tapa, aunque no está del todo claro cómo los camareros mantuvieron alejadas las moscas. Pronto, un creciente espíritu de competencia hizo que los bartenders trataran de superarse entre sí, sirviendo bocadillos innovadores en las tapas y así nació una cultura gastronómica completamente nueva.
Otra teoría mucho menos romántica es que los dueños de los bares creaban tapas porque pensaban que era una buena idea que los invitados tuvieran algo para comer mientras bebían.
Independientemente de los orígenes, ahora es común encontrar una selección de tapas en los menús de los restaurantes de todo el mundo que se especializan no solo en comida española, sino en otros estilos europeos junto con cocinas de fusión sudamericana o incluso asiática.
Una de las razones por las que las tapas se han vuelto tan populares en los tiempos modernos es la variedad de gustos y estilos que se ofrecen. Los españoles cenan tarde, tradicionalmente entre las 9:00 y 11:00 p. m. Y, a menudo, hasta la medianoche, dejando mucho tiempo entre el final de la jornada laboral y la hora de comer. Es parte de la cultura local deambular por diferentes bares comprando una bebida en cada uno y probando diferentes tapas en el camino. Se advierte a los visitantes de España que no cometan el error cultural de amontonar el plato con muchas tapas: son delicias del tamaño de un bocado que se pueden disfrutar de una en una.
En España, se pueden encontrar tapas a la venta en restaurantes más grandes, pequeños cafés o bares de moda, servidas como bocadillos, aperitivos o colectivamente como una comida completa. Se elaboran calientes o fríos, picantes o suaves, y se elaboran con carne, pescado, queso o ingredientes vegetarianos. En algunos países de Centroamérica, las tapas se conocen como "bocas".
La oferta de tapas es literalmente ilimitada, pero en todo el mundo hay algunos platos que se han vuelto prolíficos y, por lo tanto, están asociados permanentemente con el término. Entre los platos más populares y tradicionales se encuentran:
- Patatas Bravas: trozos de papa frita servidos con salsa de tomate picante o mayonesa cremosa de ajo.
- Tortilla Española - Tortilla de patatas española.
- Calamares - calamar frito.
- Gambas Pil-Pil: gambas servidas en aceite de ajo caliente.
- Chorizo, generalmente se sirve en rodajas en aceite, pero también se sirve frío.
- Jamón Serrano - jamón curado.
- Croquetas: bolas fritas rellenas de jamón, pescado o, a veces, queso azul.
- Albondigas - albóndigas.
- Boquerones - anchoas.
- Queso Manchego servido sobre tostadas.
Más recientemente, como otras cocinas han tomado prestado del concepto, las tapas han abarcado guisos, guisos e incluso pequeñas raciones de la famosa paella española, un plato de arroz que se originó en Valencia generalmente elaborado con mariscos, chorizo y otras carnes.
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