Hornos, lavaplatos, freidoras, refrigeración, aire acondicionado y otros utensilios de cocina están conectados todo el tiempo en restaurantes. Esto sumado a los sistemas de iluminación hacen que estos espacios de consumo tengan un reto importante en materia de eficiencia energética.
Las instalaciones eléctricas en las cocinas de los restaurantes son siempre el principal foco de consumo de energía, lo mismo para empresas de catering, bares, etc. De manera concreta la cocina supone 2/3 del consumo total de estos locales, por su parte la estancia o sala 1/3 de la energía. Climatización e iluminación son las siguientes dentro de la factura, seguido del agua.
¿Es posible hacer del uso energético uno más eficiente en los establecimientos? Te contamos a continuación qué puedes hacer para mejorar la eficiencia energética de tu restaurante.
Para comenzar a hablar de eficiencia energética, entendámoslo como un mecanismo que busca la adopción de tecnología y buenos hábitos de consumo, cuyo objetivo es optimizar el manejo y uso de los recursos energéticos disponibles.
En México, la Ley de Aprovechamiento de las Energías Renovables y el Financiamiento de la Transición Energética señala que el sector eléctrico debe transformarse para que al 2024 un máximo de 65% de la electricidad provenga de combustibles fósiles. Esta meta se ratifica en la Ley General de Cambio Climático que estipula que el 35% de la generación eléctrica provenga de energías limpias para ese mismo año.
El cumplimiento de las metas de mitigación de nuestro país exige una planeación detallada de la expansión de la generación de electricidad que considere una incorporación acelerada de energías limpias en el Sistema Eléctrico Nacional, que sea vinculante para que brinde certeza a los inversionistas. Esta planeación deberá incorporar también la eficiencia energética como otro de los componentes importantes para reducir las emisiones del país.
El ahorro de energía en un restaurante no solo es posible, sino que debería ser prioritario en la gestión de los espacios que va mucho más allá de la cocina, el alto coste en consumo energético es una de las principales preocupaciones puesto que se trata de los establecimientos con más consumo energético por metro cuadrado. Empero, un buen plan energético reduce la factura de luz de manera significativa, además de ser el primer paso hacia convertirse en un restaurante sostenible.
El consumo de energía en los establecimientos hosteleros se reparte de forma equitativa entre la energía eléctrica y los consumos térmicos con gas natural y otros combustibles como el Gasóleo C o Propano. La producción de Agua Caliente Sanitaria (ACS) y las instalaciones de confort térmico (climatización y calefacción junto con equipos auxiliares), son los mayores consumidores de energía de estos centros.
De acuerdo con un estudio de Justa Energía, la distribución de consumo de energía en establecimientos hosteleros se reparte un 24% en ACS, 21% en climatización, 20% en calefacción, 12% cocinas, 11% en iluminación, 7% en ascensores y 5% en otros. Acorde a The Carbon Trust, los restaurantes usan entre un 3% y 10% más de energía que la media de los edificios comerciales, lo cual representa entre el 4% y 6% de los costos operativos.
El despilfarro de energía añade complejidad al problema, pues en bastantes cocinas, solo el 40% de la energía se usa para la preparación y almacenamiento de comida; la calefacción, aire acondicionado, agua caliente… se llevan el resto. Con esto, nos damos cuenta de que la energía es una variable relevante para los empresarios del sector.
De acuerdo al último informe de eficiencia energética en PYMES de la Fundación Gas Natural Fenosa, los restaurantes tienen una nota de 6.2 sobre 10 en su ranking de edificios que mejor gestionan la energía. Otro dato interesante de acuerdo con el mismo estudio, el sector tiene un potencial del 22.6% de ahorro energético.
Entre algunos aspectos positivos a destacar que nos brindaría la inversión en eficiencia energética se encuentran:
- Reducir entre un 10% y 30% de sus costes operativos, esto sin reducir la calidad en el servicio, los productos y el confort dentro de sus estancias.
- Aumentar el valor de tu cadena de servicios, lo que aumenta la satisfacción del cliente y su fidelización.
- Datos en tiempo real recolectados desde cualquier dispositivo y lugar, lo cual ayuda en la toma de decisiones de tu negocio.
- Automatizar las operaciones de tu negocio para reducir el coste total de los activos clave como refrigeración, hornos, freidoras, aire acondicionado, etc.
- Para las empresas de catering, invertir en eficiencia ayuda a tener un ambiente de cocina más fresco y agradable. El personal está más a gusto y mejora cómo tratan a los clientes.
- Mejorar la calidad de la comida que se prepara y los estándares de higiene.
¿Qué contemplar para un plan de acción en eficiencia energética?
- Auditoría energética: Aunque el punto de partida debería ser la factura eléctrica, es importante contemplar otros gastos como los que se mencionan con anterioridad como la factura por agua o consumo de gas. Conocer con exactitud dónde y cómo se está consumiendo la energía hará que los costes estén bien justificados y sin dejar cabos sueltos.
- Contratación de energía: Con apoyo de la auditoría energética será posible contar con un estudio óptimo tanto del precio del kWh como de las oportunidades de ahorro energético.
- Contabilidad de suministros: Será necesario hacer una evaluación mensual de las diferentes facturas en los suministro.
- Monitorización: Es aquí donde la automatización de los recursos energéticos son un plus, puesto que con la instalación de algunos softwares en este caso de eficiencia energética es posible monitorizar en tiempo real el consumo de los espacios y evitar así el despilfarro de la energía.
- Sostenibilidad: En la actualidad es necesario contar con espacios sostenibles, puesto que cada vez las empresas desean evitar desperdicio de alimentos y utilizar la energía de manera eficiente, aunado al deseo de los consumidores de estar involucrados en espacios que apoyen esfuerzos de esta índole. Algunas opciones pueden ser la instalación de sistemas de protección solar, instalación de cortinas de aire en puertas exteriores o la sustitución de luminarias convencionales por tecnología LED.
Sin duda, garantizar el uso eficiente de los recursos es una práctica empresarial que mejora la rentabilidad de tu negocio, ¿qué estás haciendo para eficientar el uso de tus recursos energéticos?
Otras fuentes de información:
https://justaenergia.com/guia-para-el-ahorro-energetico-en-bares-y-restaurantes/
https://www.carbontrust.com/es/recursos/la-mejor-guia-comercial-para-el-ahorro-de-energia