Hay un monstruo que recorre los corporativos y también los garages de los emprendedores, aterrorizando a la gente de Marketing. Se cuela en las juntas de Teams y se roba la atención durante horas, genera los más extraños y urgentes planes. Es el incomprensible FOMO. Es hora de hablar de él.
FOMO, fear of missing out, es una forma de ansiedad social real. El miedo a no participar de una actividad en la que todas las demás personas están incluidas y disfrutando. Mi teoría es que hay una variante de FOMO en las empresas, que inicia cuando alguien de cierto nivel organizacional declara algo tajante como: "tenemos que estar en TikTok".
Si es un restaurante, entonces dirá algo como:
"Mi sobrino dice que nuestra comida no es instagrammeable"
En un hotel:
"Todos están dando descuentos, ¿por qué nosotros no? ¡Si hoy es Groundhog Day!"
¿Les ha sucedido? Entonces saben que lo que sucede inmediatamente después es que todo el mundo sale corriendo a aprender coreos de tiktok, o a investigar qué rayos es el día de la Marmota y quienes son esos TODOS que están dando descuentos. D E T É N G Á N S E A H O R A. Pare. Deje de bailar y siga leyendo. Están sufriendo un ataque de FOMO empresarial. Primero, no se confunda. Por supuesto que estar en Tiktok puede ser valioso; y es importante participar en una temporada promocional. Cuando aparece un episodio de FOMO, lo más importante es que alguien pregunte: ¿Para qué queremos hacerlo? Y la respuesta no puede ser “porque todos lo están haciendo”. Eso no garantiza nada. ¿Qué valor le traerá a su empresa estar en TikTok? ¿Cuántos recursos nos costará crear el spot instagrammeable? ¿Nuestro público objetivo participa en el Groundhog Day?
El hecho es que reaccionar rápido siempre es costoso en tiempo, recursos humanos y dinero. Por eso, actuar solo por FOMO puede desenfocar los recursos de las metas reales, para terminar con una cuenta de Tiktok que no la ve ni la familia dueña de la compañía.
Le invito a que, dentro de su empresa, del tamaño y giro que sea, identifique y combata el FOMO. Tres consejos muy sencillos.
- Tenga un plan de marketing. Cuál es el objetivo, qué acciones haremos durante el año, qué recursos nos tomará y qué obtendremos con ello. Y trate de apegarse a él como los marinos evitaban el canto de las sirenas.
- En ese mismo plan, escriba por qué no está participando en las “nuevas tendencias”. Evalúe cuál sería el beneficio de participar, y cuanto costaría en tiempo, dinero y esfuerzo. Esta parte es complicada, pero es el antídoto para el FOMO. “Ya evaluamos el Groundhog Day y sólo el 1.2% de nuestro público participa en él”.
- Eduque a sus ejecutivos. Es en serio. Que algo salga todo el tiempo en tu Facebook no quiere decir “que todos estén ahí”. Quiere decir que un grupo de tus contactos lo está diciendo, y tú le has puesto mucha atención. Hay que aprender a evaluar las tendencias y su conveniencia.
Estas tres acciones ayudarán a evitar el FOMO empresarial, y convertirlo (¿por qué no?) en una agenda de innovación real, con proyectos que puedan hacer crecer a su empresa. Reaccionar rápido es muy importante: pero alineado a la estrategia y los objetivos.
Ahora, si su jefe insiste en el TikTok, pare de leer y continúe bailando. Esas coreos no se van a grabar solas - y todos los días hay nuevas.
Comunicólogo de profesión, Agustín Gutiérrez ha tenido una carrera de más de veinte años en Marketing en tres industrias diferentes: Publicidad, Consumo Masivo y Moda.mHa liderado equipos en 4 empresas del índice Fortune 500: Interpublic (McCann), TV Azteca, Coca-Cola FEMSA y VF Corporation (The North Face). Fue también Head of Marketing de la marca de lencería Ilusión en México, Estados Unidos y Centroamérica. Hoy se dedica a Desarrollo de Negocios para generar networking entre clientes y agencias.
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